sábado, 14 de marzo de 2009

LA CARCEL DE LAS 7 PAREDES

Encerrada entre las paredes de una cárcel con una puerta de cristal, tu rostro se ilumina cada vez más.
Una señal recriminatoria recordada forzosamente en la manilla.
SI TOCAS LA PARED PUEDE HACERSE DE PIEDRA Y NO VOLVERÁS A VER NADA MÁS.
Una cama postrada, con poca utilidad por las noches transcurridas con los ojos abiertos.
Tu cara formando un póster imaginario colocado en el techo no es de gran ayuda.
Una vida atada con cadenas y sogas, si intentó desatarlas mi vida no valdrá nada más que un intento.
Un paso adelante y dos atrás, no ayuda a recorrer el camino a la libertad.
Libertad esa palabra que tiene derechos de autor para llegar a ella y que claramente no tengo en mis manos,
¿Realmente la palabra libertad llegará a estar acompañada de la palabra FELICIDAD?
¿Qué significado tiene la palabra libertad si cuando la conseguimos nuestros sueños se han visto afectados por el paso del tiempo y ya es tarde para lograr la felicidad?
Un mundo en el que vivimos los momentos felices rápidamente y en el que todos valoramos en ocasiones nada numerosas lo que realmente tenemos delante de nuestros ojos, cogiéndonos la mano pese a nuestro pesar.
Eso no es vivir la vida como realmente merecemos.
Una luz en nuestro camino lleno de obstáculos. Un forzoso deseo. Una imagen translucida que nos hace pensar en todo aquello que nos merecemos o en lo que CREEMOS que nos merecemos.
Un sofá en el que sentarse para ver pasar nuestra vida en una pequeña pantalla,
Esa pantalla en la que todos estamos obligados a ver las cosas maravillosas.
¿Quién no ha soñado alguna vez con ser esa persona irreal que poco tiene de perfecta?
Si realmente pensamos y creemos en lo que verdaderamente importa, una vida nueva se verá reflejada en nuestra pantalla.
Tu póster va desapareciendo a medida que veo pasar mi vida, sin tener en mis manos algo con lo que dibujar y mantener tu rostro eternamente,
Una maleta de viaje hará de trampolín para que las 4 paredes queden como piso inferior y por fin pueda llegar al escalón más alto mi podium.

CREANDO NUESTRA PROPIA EXISTENCIA.

Un ser extraño aparece cada noche en mis sueños.
Una pared llena de manos que reflejan cada ansia de vivir.
Una alegría forzada en un mundo fantástico.
Un pequeño bote salvavidas en mitad de un desierto.
Corazones llenos de curiosidad y afectuosidad.
Ese pequeño anhelo que todos tenemos al ver ese sueño todavía sin cumplir en nuestra mente.
Un ser humano reflejado en el más paciente de los animales.
Todo recuerda tu presencia, todo aquel rulo rodeado de manto blanco.
Un reloj lleno de horas pasadas sin tener nada entre sus números.
Poca diversión en una sala llena de juegos.
3 números llenos de buena suerte en el que puede no salir ninguno premiado.
Un género impar que no tiene más que mala suerte.
Bancos llenos de momentos inesperados y alguna espera.
Una llamada creada por alguna especie de mudo.
Ver todas esas intenciones y no acecharlas por miedo a que sean desvanecidas por un tipo de aire.
Mis ángeles ayudan a crear una nota en tu mundo. Nota que pronto resultará quemada por mis latidos.
Un "enseguida" acompañado de un "hasta luego" y no volver a ver nunca más al ser más maravilloso pero a la vez más extraño del planeta.
Solo hace falta una maleta para adivinar que en tu juego la vida está llena de complicaciones.
Anhelar una cosa y al día siguiente ver que ha estado rodeada de la mala fortuna de la vida.
Labios rodeados de intensidad y flores marchitadas.
Solo un adiós y el corazón será tuyo para siempre.

UN CAMINO HACIA NINGÚN SITIO EN PARTICULAR

Ayudándome de tu mano, me logré equilibrar y comencé a andar. No creas que es fácil caminar sin más ayuda que un candelabro sin encender en una noche completamente oscura. Sin ti las manías más defectuosas se vuelven auténticos torbellinos. Eres el alma de todo aquel ciervo con el que me codeo a cada paso que doy. Un libro abierto sin escritura, intentaré resolver aquel acertijo pasado sin solución. Con la grandiosidad de una generosa recompensa intentaré saciar todo aquel recuerdo que en mis ojos dejaste al marchar.
Una jaula llena de lobos hambrientos y nada más un sello en una mano que me recuerda todas aquellas realidades soñadas que tú creaste. Una acera llena de pisadas que no van a ninguna parte, vagones de tren llenos de asientos vacíos que cierto día del pasado estuvieron ocupados por todos aquellos soñadores con sus descubrimientos y grandes perspectivas pero también de estúpidos y dañinos fracasos.
La gran ayuda de un ser humano es la habilidad de poder crear su propio castillo en una vida rodeada por mundos vacíos.
Caminar por la senda de un maravilloso y fondoso bosque y no poder ver más allá de nuestros pies, mirar esas pisadas que significaron una despedida y un regreso a un inesperado lugar.
Esos pies que tantas ataques de pánico vieron y tantas huidas formaron.
Esos pies que algún día usaré para lograr dar la patada final a este mundo sin ninguna portería.